Los diseños tradicionales de champlevé están compuestos de huecos grabados o cincelados en la superficie del metal,que luego se rellenan on esmalte al tiempo que se deja un borde de plata. El grabado suele usarse como proceso preparatorio. Como las zonas ahuecadas tienen que ser profundas, emplee una lámina de 1 mm de grosor o más y grábela hasta por lo menos la mitad.
Método
1.- Caliente el horno a 870ºC y prepare los esmaltes como le hemos indicado en publicaciones anteriores.
2.- Limpie el metal. Si aplica una capa de contraesmalte en la parte posterior de la pieza, el metal no se curvará, sobre todo si es fino.
3.- Sumerja en ácido la plata una vez que se haya cocido el contraesmalte, limpie la superficie delantera con un cepillo y elimine los restos de ácido. Compruebe que no queda suciedad ni grasa en los huecos.
4.- Introduzca y compacte el esmalte en los huecos. Dé unos golpecitos al metal para que quede al mismo nivel que el esmalte, y elimine el agua sobrante.
5.- Cocer la pieza y cuando esté fría, aplique más capas de esmalte hasta que quede nivelado o sobresalga de la superficie de la plata. Frote la superficie con una piedra de lapidar bajo el agua corriente hasta que el esmaltes está al mismo nivel que la plata; si quedan marcas o burbujas en el esmalte, tendra que aplicar más y cocerlo. Vuelva a frotar la superficie con el pulidor de diamante si es necesario, y luego con papel de lija para afinarla.
6.- Meta de nuevo la pieza en el horno para la cocción final.
